Cada año nuevo despierta preguntas acerca de la cuenta del tiempo y, en Guatemala, sobre el sistema sistema calendárico maya: uno de los más exactos del mundo. Su ciclo no coincide con los del calendario occidental, pero sigue allí, con sus energía y significados según la tradición ancestral.
Por Raxche’ Rodríguez Guaján
Maya kaqchikel, director de la editorial Maya Wuj
Los pueblos del mundo han observado el firmamento desde que tuvieron conciencia. Observaron el paso del Sol, la Luna, los planetas, las estrellas, los eclipses. El resultado de sus observaciones astronómicas llevó a tener calendarios solares y/o lunares con diferentes grados de precisión: Hebreo, Ruso, Juliano, Islámico, Hindú, Persa, Maya, Gregoriano, etcétera.
El calendario Juliano llegó a Abya Yala hoy América, y a la actual Guatemala en 1524. El Juliano tenía una duración de 365.2500 días. En 1582 inició el calendario Gregoriano: el 4 de octubre anocheció con el calendario Juliano y amaneció con el Gregoriano el 15 de octubre de 1582. El calendario gregoriano tiene una diferencia de 3 diezmilésima parte del día con el calendario solar de la NASA. Tiene 26 segundos de diferencia.
El Pueblo Maya es ampliamente conocido por sus múltiples adelantos científicos en matemática, astronomía, arquitectura, agricultura, medicina, etcétera. En universidades como Harvard, Cambridge, Oxford, Pekín, Stanford, Tokio, McGill, Moscú se estudia la civilización maya y entre esos análisis está la cuenta del tiempo, que se hace a través de tres calendarios, pero es un solo sistema.
El periódico The Guardian de Gran Bretaña, señala a Tikal, una de las ciudades más grandiosas del Pueblo Maya, como una de las 7 maravillas «alternativas» del mundo; otras encuestas públicas con más de 100 millones de votos, señalan a Chichén Itza como una de las 7 maravillas del mundo aún en pie.
El Pueblo Maya inventó el cero y, con esto, logró un sistema numérico basado en posiciones. Este invento le permitió registrar sus múltiples observaciones astronómicas. El sistema calendárico maya incluye tres ciclos centrales:

1. Choltun o cuenta larga
El Choltun marca los ciclos en que el Pueblo Maya concibe el tiempo. El 21 de diciembre del 2012, el Choltun marcó la fecha: 13 B’ak’tun, 0 K’atun, 0 Tun, 0 Winaq, 0 Q’ij.
Es el calendario que utilizaron nuestros antepasados mayas para llevar el registro del tiempo en forma lineal. La Cuenta Larga o Choltun lleva el recuento de los días transcurridos a partir del día 4 Ajaw (en el Cholq’ij) 8 Kumk’u (en el Ab’). Corresponde en el calendario gregoriano al 13 de agosto del año 3114 antes de nuestra era. Es un recuento de tiempo simultáneo al de los otros calendarios.
De acuerdo con las inscripciones en la Estela C de Quiriguá, esta fecha significa que nuestro tiempo se inició a contar a partir de 4 Ajaw 8 Kumk’u. Ese día todos los ciclos calendáricos de la Cuenta Larga superiores a 20 años se fijaron en 13; es decir, los ciclos de 400, 8 mil, 160 mil, 3 millones 200 mil años, etcétera.
En la ciudad maya de Cobá, Estado mexicano de Quintana Roo, está registrada la fecha de la «Creación del Mundo» o el «Inicio del recuento del tiempo» con 20 unidades superiores al K’atun
Según la concepción maya del tiempo, el 13 B’ak’tun (21-12-2012) marcó el inicio de la Nueva Era en la historia de la humanidad, particularmente para los pueblos originarios. Las profecías anuncian procesos de cambio que conducen a un nuevo amanecer, de desarrollo, con identidad y dignidad para los pueblos originarios. En esta lógica, no es casual que la ONU declarara el Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas (2022-2032).
Por Raxche’ Rodríguez Guaján
Maya kaqchikel, director de la editorial Maya Wuj

2. Cholq'ij, cuenta de 260 días
El Cholq’ij organiza una combinación de los numerales del 1 al 13 con los 20 nombres de los días. Al realizar la combinación de los 13 números y 20 días, se forma un ciclo de 260 días diferentes. Las abuelas y abuelos nos dicen que cada persona tiene su Ch’umilal, es decir, su Misión en la vida.
Esta Misión se ve influenciada por el Cholq’ij, según el número y nombre del día de nuestro nacimiento. Todas las personas nacemos con habilidades y capacidades que nos permiten crecer, así como aportar al desarrollo de nuestro pueblo. Si queremos ser mejores personas, un paso fundamental es descubrir nuestra Misión-Ch’umilal, el sentido de nuestra existencia.
Ejercicio: Calcula el día de tu nacimiento según el Cholq’ij. A partir de tu propia experiencia, busca la explicación de por qué este calendario se sigue utilizando miles de años después de su creación. Calcula esta fecha aquí.


Ab' o calendario solar de 365.2420 días
Está basado en el movimiento de rotación de la Tierra alrededor del Sol. Tiene 18 meses de 20 días cada uno, más un período de 5 días del Tz’apiq’ij (en la familia de idiomas K’iche’) o Wayeb’ (en Maayat’aan [Yukateko]). Para el año 2023, el Tz’apiq’ij se celebra cinco días antes del primer día del año Ab’, que inicia el 26 de marzo de 2023.
Según Sylvanus Morley, el Ab’ tiene 365.2420 días de duración. Tiene una diferencia de 2 milésimas partes del día con el calendario solar calculado por la NASA, 17 segundos de diferencia.
En el sistema educativo nacional tenemos el reto y la oportunidad de retomar la precisión astronómica del Ab’. Además, es muy admirado en el mundo, pero muchas veces es desconocido en nuestro país. Un paso fundamental ha sido la inclusión de la celebración del Ab’ en el calendario de actividades escolares del MINEDUC a partir de 2022.
Según Silvanus Morley –arqueólogo y epigrafista– los astrónomos mayas elaboraron el calendario más exacto que la humanidad calculó hasta antes de la era espacial:
Año juliano 365.2500 días
Actual gregoriano 365.2425 días
Astronomía maya (Ab’) 365.2420 días
Astronomía moderna 365.2422 días
Vasta y fascinante multiculturalidad de Guatemala. Conócela
