La green card es el documento que certifica la residencia de una persona en Estados Unidos, por eso es importante portarla.
En Estados Unidos, ser residente permanente implica no solo haber obtenido la llamada Green Card, sino también llevarla consigo de manera constante.
Aunque muchos desconocen esta obligación, la ley federal es clara: todo residente mayor de 18 años debe portar en todo momento un comprobante válido de su estatus migratorio.
La base legal
De acuerdo con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), la Tarjeta de Residencia Permanente funciona como la principal prueba de que una persona vive y trabaja legalmente en el país.
La obligación de llevarla consigo proviene de la Sección 264(e) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), que establece que no portar este documento puede derivar en una falta menor punible con multa o incluso detención.
¿Por qué es importante tenerla siempre a la mano?
1. Evitar ser tratado como indocumentado:
Durante la administración Trump se incrementaron las redadas migratorias y los controles en espacios públicos y privados. En situaciones de verificación, no portar la Green Card podía exponer a residentes permanentes a demoras, interrogatorios e incluso a ser confundidos con inmigrantes indocumentados.
3. Respaldo frente a autoridades migratorias y policiales:
En un país donde las políticas migratorias pueden endurecerse con rapidez, portar el documento es una medida de seguridad. Incluso hoy, en estados con leyes migratorias estrictas, no mostrar la Green Card en una parada policial puede generar complicaciones legales.
¿Qué pasa si se extravía?
USCIS advierte que, en caso de pérdida o robo, el residente debe solicitar un reemplazo mediante el Formulario I-90. Mientras se procesa, el recibo de esta solicitud sirve como constancia temporal de residencia.
Una costumbre necesaria
Aunque muchos residentes prefieren guardar la Green Card en casa por temor a perderla o dañarla, especialistas recomiendan portar el documento siempre en la billetera o el bolso, y considerar una copia plastificada para trámites menores, reservando la original para casos en que sea obligatoria mostrarla.
La Green Card no solo simboliza la permanencia legal en Estados Unidos, sino que es la prueba tangible de derechos adquiridos. Portarla es una obligación legal y una estrategia de protección frente a situaciones en que, sin ella, un residente puede ser confundido con un indocumentado.
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