Las ciudades de Piedras Negras y Yaxchilán, a los lados del Río Usumacinta, eran rivales y tenían cada una pequeñas ciudades aliadas. El gobernante de La Pasadita, Tiloom, aparece aquí entregando una ofrenda al señor de Yaxchilán. Esta escena tallada en madera se resguarda en el Museo Metropolitano de Nueva York.
Este dintel de madera, resguardado hoy en el Museo Metropolitano de Nueva York, estuvo muy probablemente instalado en el techo de la entrada de un templo del sitio llamado La Pasadita, cerca del río Usumacinta, en el noroccidente de Petén y cuyo nombre prehispánico se desconoce.
El objetivo de estos dinteles era exhibir a quién rendían fidelidad los gobernantes de sitios pequeños, es decir, propaganda. El gobernante Tiloom, que gobernó entre 750 y 770, ofrece un tocado muy elaborado al líder sentado, el gobernante Escudo Jaguar de Yaxchilán, quien se inclina hacia sus visitantes, luciendo un elaborado adorno de plumas para el cabello, un tapón nasal con plumas y un collar de cuentas de jade con un colgante de barra.
Este dintel de madera, resguardado hoy en el Museo Metropolitano de Nueva York, estuvo muy probablemente instalado en el techo de la entrada de un templo del sitio llamado La Pasadita, cerca del río Usumacinta, en el noroccidente de Petén y cuyo nombre prehispánico se desconoce.
El objetivo de estos dinteles era exhibir a quién rendían fidelidad los gobernantes de sitios pequeños, es decir, propaganda. El gobernante Tiloom, que gobernó entre 750 y 770, ofrece un tocado muy elaborado al líder sentado, el gobernante Escudo Jaguar de Yaxchilán, quien se inclina hacia sus visitantes, luciendo un elaborado adorno de plumas para el cabello, un tapón nasal con plumas y un collar de cuentas de jade con un colgante de barra.
Justo en esos años, Piedras Negras y Yaxchilán estaban en una fuerte rivalidad que llegó a la guerra. Tiloom era aliado de Yaxchilán y así se muestra en otras estelas donde aparece. El sitio La Pasadita fue explorado en la década 1960, tiempo en el cual varias piezas fueron extraídas.
Es llamativa la excelente conservación del dintel, por la cantidad de pigmento preservado en la superficie. Tiene colores rojos, amarillo-naranja y azul-verdes, que permiten tener una buena idea de la apariencia original de colores brillantes de los dinteles.
De hecho, las joyas de jade de los personajes principales, así como detalles del trono, tienen tonos azulados y verdes, que evocan jade.
Otro de los aspectos fascinantes del dintel es que tiene la «firma» del autor: un artista llamado Chakalté. «Las firmas de los escultores son relativamente raras en el arte maya, aunque se conocen muchas en el área alrededor de Yaxchilán y Piedras Negras. Chakalte’ probablemente fue un escultor que trabajó bajo el patrocinio de Escudo Jaguar IV. Se sabía que ese líder enviaba escultores a los demás señores provinciales», explica el sitio del Met Museum.
Tiloom se para orgullosamente presentando al señor sagrado de Yaxchilán un tocado y lo que podrían ser paquetes de incienso o un plato de tamales. Tiloom usa una diadema de jade y un pectoral con cabeza humana, con una elaborada falda tejida con un patrón geométrico.
Un tercer personaje se encuentra de pie detrás de Tiloom con un atuendo similar pero con un tipo de sombrero asociado en otras escenas con viajeros o comerciantes.
Finalmente se puede ver el detalle de un cuenco de fruta cortada con semillas visibles se encuentra debajo del trono, presumiblemente parte de la ofrenda llevada al gobernante sentado. Este dintel es importante porque muestra al último gran señor de Yaxchilán recibiendo tributo en forma de comida y vestimentas de un señor leal a su padre. A inicios del siglo 8, desaparecieron estas dinastías.