Picarse la nariz o introducir objetos puede hacerte más daño del que te imaginas, por eso debes evitarlo.
Picarse la nariz o introducir objetos en ella es un hábito común que, aunque muchas personas lo consideran inofensivo, puede traer consecuencias graves para la salud. Ana Gómez, otorrinologa, advierte que esta práctica incrementa el riesgo de infecciones, sangrados y daños en las estructuras internas de la nariz.
La mucosa nasal está recubierta por una fina capa de tejido muy sensible y con abundantes vasos sanguíneos. Al introducir los dedos u objetos extraños, se pueden provocar microlesiones que facilitan la entrada de bacterias y virus, lo que puede desencadenar infecciones como la rinosinusitis. Además, en casos más graves, las bacterias pueden pasar al torrente sanguíneo y generar complicaciones.

Riesgos más frecuentes
Uno de los riesgos más frecuentes es la epistaxis o sangrado nasal. Este puede ir desde una pequeña hemorragia hasta sangrados intensos que requieren atención médica, especialmente si se dañan vasos importantes ubicados en la zona conocida como “plexo de Kiesselbach”, altamente propensa a lesiones.
Los médicos también alertan sobre el peligro de introducir objetos, particularmente en niños, ya que estos pueden quedar atrapados y causar obstrucciones respiratorias, dolor, inflamación e incluso perforaciones del tabique nasal. En algunos casos, es necesario realizar procedimientos quirúrgicos para retirarlos.
Asimismo, este hábito puede empeorar problemas respiratorios existentes, como alergias o inflamaciones crónicas, al alterar el equilibrio natural de la mucosa y reducir la eficacia de los cilios nasales, que son responsables de filtrar y limpiar el aire que respiramos.
Mejorar la higiene nasal
La recomendación de los especialistas es mantener una adecuada higiene nasal a través del lavado con soluciones salinas, evitar manipular la nariz con las manos y buscar atención médica si hay secreción persistente, sangrados frecuentes o dificultad para respirar.
Más allá de ser un hábito poco estético, picarse la nariz o introducir objetos en ella representa un riesgo real para la salud que puede prevenirse con información y cuidado personal.
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