¿No te alcanzan tus ingresos mensuales? ¿Tienes deudas? La solución a esos problemas está en una palabra: presupuesto.
Muchas veces revisar tus finanzas puede dar miedo. Sí, saber que no has utilizado bien tu dinero es enfrentarte al temor de que algo no estás haciendo bien, pero es justo ahí cuando debes tener el valor de tomar el hábito y la disciplina para manejar tu recurso económico.
Para elaborar un presupuesto requieres tres cosas: tiempo, disciplina y metas claras. Sí, es importante que te sientes tomes una pluma y papel y analices qué haces con el dinero que obtienes. A la hora de planificar ese presupuesto también debes tener claro cuáles son los objetivos, esos sueños que tienes.
Gilroy Álvarez, experto financiero guatemalteco radicado en Nueva York, EE. UU., nos comparte seis puntos clave para elaborar un presupuesto.
1. Revisa tus estados de cuentas bancarios
La pregunta clave es ¿En qué estás gastando tu dinero?
Este paso es importante porque a partir de ello debes chequear cuáles son esos gastos que estás efectuando. Revisa al menos los últimos meses de movimiento que has tenido. Acá debes diferenciar cuáles son esos gastos fijos como los bills, algún préstamo que tengas por compra de un carro u otro bien que no puedes dejar de pagar. Y los gastos variables: el supermercado, la gasolina u otro en el que puede cambiar la cantidad que gastas mes a mes.
2. Establece metas para ahorrar
Si deseas viajar en las vacaciones establece la cantidad que necesitas para ese viaje y comienza asignar cierta cantidad de tus ingresos para ese viaje. Evita usar una tarjeta de crédito, por qué, bueno si no eres muy disciplinado con los gastos puedes comenzar por este objetivo. Si gastas en ese viaje US$1000 con la tarjeta de crédito lo ideal es que tengas esos US$1000 en efectivo, para que al regreso ese dinero no lo debas sino que ya tienes el disponible para pagarlo.
3. Determina cómo utilizar tu dinero
Es importante que te focalices en las metas que deseas, si quieres comprar un carro, una casa, apartamento o un celular de alta gama establece la prioridad de lo que debes gastar y en lo que no para que puedas tener un hábito de ahorro y enfocarte en alcanzar ese sueño.
Por ejemplo, si ves que gastas mucho en comida ahí es donde debes disciplinarte a disminuir el gasto. Si esos zapatos, ropa o reloj no son necesarios designa ese dinero en tu presupuesto para alcanzar el objetivo a largo plazo.
4. Crear el presupuesto
Acá es hora de poner las manos sobre la mesa.
Descarga alguna aplicación en tu móvil, usa esa libreta de notas que tienes guardada por ahí o abre una hoja en Excel y comienza a elaborar ese presupuesto donde visualices los ingresos, gastos fijos o variables, esas metas a corto, mediano y largo plazo y las metas de ahorro. ¡No lo pienses tanto!
5. Asignar un presupuesto
Acá visualiza ¿cuánto quieres ahorrar?, ¿cuánto necesitas para ese viaje?, ¿cuánto debes pagar en bills o en algún préstamo?, ¿cuánto dinero quieres gastar en comida, cuánto en comprarte algún accesorio? Además, Gilroy también recuerda que no solo se trata de ahorrar también puedes invertir, con ello darás rotación a tu dinero y por consiguiente lograr aumentar tus bienes.
Gilroy nos comparte una regla aplicar, la del 50,30,20: El 50% deben ser las necesidades que debes cubrir, el 30% asignarlo en lo que deseas hacer como actividades de entretenimiento. Y un 20% asignarlo al ahorro. La recomendación es que mientras más ganes tu porcentaje de ahorro debería aumentar. Si tu ingreso no te lo permite, ya que este es limitado, puedes comenzar con ahorrar al menos un 5%.
6. Actualizar tu presupuesto
Ya de por sí establecer la creación de un presupuesto es un objetivo alcanzado, pero también es importante que constantemente te tomes unos minutos para que mes con mes veas cómo va ese presupuesto.
Recuerda que en cualquier momento tus ingresos pueden aumentar o disminuir o tus hábitos de consumo pueden variar, para entonces acoplar ese presupuesto a tus necesidades presentes.
Algunos malos hábitos
Revisa bien lo que estás haciendo con tu dinero. Toma en cuenta estos malos hábitos.
• Evita decir que no tienes tiempo para ver tus finanzas.
• Debes enfrentar esos malos hábitos que te hacen gastar por gastar sin obtener un beneficio a futuro para tus finanzas como comprar ropa de forma compulsiva o gastar mucho en comida.
• No dejes a un lado el sueño o propósito de que tus ahorros y riquezas deben aumentar. Enfócate en las metas que tienes.
“Un buen presupuesto es decirle a tu dinero a dónde ir, en lugar de preguntarte a dónde se fue”.- John Maxwell
No dejes de aplicar estos consejos
