Hace una década, Jairo Estuardo Similox inició Brinlox Joyería junto a su esposa y un familiar, enfrentando desafíos y apostando por la calidad artesanal. Sin tienda física, pero con determinación, lograron posicionarse en el mercado con piezas exclusivas de oro y plata, combinando creatividad y tradición.
Lo que comenzó como un sueño sin capital, hoy es Brinlox Joyería, un emprendimiento que refleja pasión, esfuerzo y el amor por el arte. Jairo Estuardo Similox, junto a su familia, ha superado obstáculos para ofrecer joyas únicas, elaboradas con dedicación y un sello personal que trasciende fronteras.
Hace diez años, en un pequeño rincón de Chimaltenango pero también cobra fuerza en Sololá, nació un sueño llamado Brinlox Joyería. Su fundador, Jairo Estuardo Similox, junto a su esposa y un familiar, dieron vida a este emprendimiento con esfuerzo y dedicación. Aunque el camino no ha sido fácil, su pasión por la joyería artesanal les ha permitido superar obstáculos y consolidarse como una marca reconocida en el sector.
Su tienda digital Brinlox Joyería ya está abierta en SoyMigrante.com MERCADO, la comunidad en línea creada para que emprendedores y compradores guatemaltecos se encuentren: un proyecto activo, proactivo e innovador para pequeños negocios y creadores de productos elaborados a mano, detrás de los cuales siempre hay una historia. Y esta es la historia de como nació este emprendimiento familiar.
El origen de Brinlox Joyería
La idea surgió cuando Jairo deseaba vender joyas por catálogo, pero la falta de capital era un impedimento. Sin embargo, la determinación de la familia los llevó a buscar alternativas y encontraron en la venta en línea una gran oportunidad. A pesar de no contar con una tienda física, han logrado llegar a clientes de diversas regiones, destacándose por la calidad y originalidad de sus piezas.
Inicialmente, el emprendimiento tenía otro nombre, pero posteriormente lo cambiaron a “Brinlox”, un término que combina las primeras letras del nombre de su hija con su apellido. Esta elección refleja el carácter familiar y cercano del negocio.
La esencia artesanal de Brinlox Joyería
Cada pieza de Brinlox Joyería es cien por ciento artesanal, elaborada en plata y oro. Sus diseños pueden ser propios o personalizados según las solicitudes de los clientes. “Los clientes siempre quieren algo novedoso. A veces nos piden diseños más avanzados, pero nosotros trabajamos artesanalmente”, comenta Jairo.
El proceso de elaboración varía según la pieza. Un par de aretes puede tardar entre dos y tres días, mientras que las joyas con jade requieren un tiempo adicional, ya que las piedras son adquiridas y posteriormente trabajadas. En el caso de piezas personalizadas, el tiempo depende en gran medida de la complejidad del diseño. Algunas joyas son dibujadas desde cero, mientras que otras se crean a partir de moldes ya establecidos.
Retos y aprendizajes
A lo largo de su trayectoria, Brinlox Joyería ha enfrentado momentos difíciles. En alguna ocasión, la falta de demanda los llevó a pausar sus ventas en línea. En un intento por expandirse, diseñaron un catálogo de ventas, pero los costos resultaron ser elevados. A pesar de estos desafíos, la perseverancia de Jairo y su equipo ha sido clave para mantener vivo el sueño.
“He aprendido que cuando a uno le nace una idea, un emprendimiento, esas ganas de hacer algo, no hay que dejar de luchar. Un día me desesperé y lo dejamos por un tiempo, pero volvimos con más fuerza”, afirma Jairo. Además, destaca que su compromiso está en ofrecer calidad a sus clientes: “Respetamos el trabajo de cada joyería, pero nosotros sabemos cómo trabajamos: con calidad”.
El camino del emprendedor
Jairo Estuardo Similox es un creativo innato. Aunque no pudo continuar con sus estudios debido a dificultades familiares, encontró su pasión en el diseño y la joyería. Además de elaborar piezas exclusivas, también se dedica al diseño de muebles de madera y melamina. Su interés por los negocios lo ha llevado a explorar nuevas oportunidades y a seguir innovando.
Aprendió el arte de la joyería con la ayuda de un familiar, ya siendo adulto. En el 2024, intentó expandir su mercado a nivel internacional y viajó a Estados Unidos, donde visitó Nueva York en busca de oportunidades. Aunque no logró establecer un mercado allí, la experiencia le sirvió de inspiración para seguir perfeccionando su trabajo.
El futuro de Brinlox Joyería
Jairo y su equipo están convencidos de que apoyar el mercado nacional es fundamental para el crecimiento de los pequeños negocios. “Siempre he tenido el gusto por las joyas y creo que hay que respaldar a los emprendedores locales. Así es como crecemos todos”, concluye.
Brinlox Joyería es más que un negocio; es el reflejo de un sueño hecho realidad, construido con esfuerzo, pasión y un firme compromiso con la calidad. Su historia es un testimonio de perseverancia y amor por el arte de la joyería artesanal.
Detrás de cada emprendimiento siempre hay una gran historia
