Marvin Rodríguez es profesional de la programación, trabaja en Boston, Massachussets. Resuelve intrincados desafíos tecnológicos pero también aporta nuevos pasos en su Palencia, natal.
Nunca debemos olvidar de donde venimos”, declara Marvin Rodríguez, analista de programación guatemalteco radicado en Boston, Massachussets, fundador de la iniciativa Yuntos: cuyo objetivo es recaudar zapatos de medio uso los cuales clasifica y envía a su tierra natal, Palencia, Guatemala.
En el documental En mi camino, Marvin relata algunas de sus vivencias antes y después de haberse radicado en Estados Unidos. Dicha pieza fue elaborada en colaboración con su hermana Rosario Rodríguez, quien es realizadora audiovisual.
“Un par de zapatos puede ser algo tan rutinario y casi insignificante para una persona que tenga varios, pero para muchas personas es algo que puede ayudar mucho en el camino que todos llevamos. Así que estos pasos, esta segunda historia para zapatos en buen estado, es quizá un regalo muy sencillo pero que puede significar un ánimo en el camino para quien lo recibe”, expresa Marvin, quien a los 9 años emigró a EE.UU.
Así ocurrió el choque cultural
“Mi papá trabajaba en agricultura, en el estado de Nueva York, por temporadas llegaba a visitarnos y luego se iba. Me hacía falta verlo más seguido. Crecí en la casa de mis abuelos en cantón Rincón de la Piedra, Palencia. Finalmente, mi papá pudo tramitarnos una residencia legal y por fin estábamos juntos toda la familia”, relata.
“El choque cultural fue fuerte. Yo no hablaba nada de inglés, tuve que comenzar a aprenderlo casi de cero. Sentía que era imposible, pero poco a poco, con empeño, con deseo de salir adelante lo fui captando, comprendiendo y hablando”.
“También extrañaba la vida en la casa del abuelo, a mis amigos, la tranquilidad del pueblo, el sabor de la comida. Siempre me encanta regresar a comer frijolitos con crema y queso, con ese sabor único”.
Marvin estudió Programación digital en la universidad pública Oneonta, de Nueva York. No fue un camino sencillo. De hecho hubo momentos en los cuales se le dificultó la matemática y también el lenguaje informático. “Como todo lo nuevo y lo grande, es difícil. Por momentos te preguntas ¿a qué me metí? Pero lo más importante es sacar las fuerzas para continuar. El reto es siempre contra uno mismo… uno mismo se pone las barreras y uno también se pone las metas más altas.”
Por supuesto, sin el apoyo de mi familia nada de esto sería posible. Nadie puede salir adelante solo y por eso es que sentí la obligación de hacer algo por la gente de mi pueblo.
Así surge Yuntos
Marvin regresa periódicamente de vacaciones a Palencia. En esas ocasiones no solo redescubría el valor de su comunidad, sino también las necesidades que existían. “Al visitar a los vecinos o jugar una chamusca con los amigos me daba cuenta de las dificultades de algunos. Traía unos cuatro o cinco pares de zapatos para uso personal.. y me iba sin ni uno, porque los obsequiaba. Así comencé en cada viaje a recaudar zapatos en buen estado, tenis, formales, de niña, de niño y también para adultos. Cuando se corrió la voz, llegaba gente a encargar a la casa de mis abuelos, cuando yo regresara”.
Marvin crea la iniciativa Yuntos con apoyo de amigos, de su hermana Rosie. “Lo más costoso es el envío, porque hemos llegado a juntar hasta 600 pares. Los clasificamos. Enviamos todo lo que recibimos. En nuestro sitio digital hay un apartado para donar US$1.50. Con eso hemos reunido fondos para varios envíos”.
Ese momento de la repartición es una auténtica fiesta. Niños felices, sonrisas de madres, alegría de padres y abuelos al recibir unos zapatos en buen estado. “Algunas personas nos dicen ahora ya tengo zapatos para ir a misa, o para ir a una entrevista de trabajo, para la escuela. Creo que hacemos caminos nuevos para los zapatos pero también para las personas. Es mi forma de agradecer a Guatemala todo lo que me ha dado: mi familia, mi identidad, mi vida”, finaliza.
Si quiere colaborar o conocer más del proyecto, visite su página https://yuntos.org/
n mi camino, pieza documental de la realizadora Rosario Rodríguez, quien apoya así la iniciativa Yuntos, impulsada por su hermano Marvin Rodríguez.
