La chef Verónica Zelada fusiona sabores muy guatemaltecos con el gusto estadounidense en restaurante Kacao, de Oklahoma. Su afán de excelencia y servicio le ha valido ser nominada en los reconocimientos Mujer del Año, del diario de negocios Journal Record.
Verónica Zelada es una chef guatemalteca, migrante y emprendedora, cuyo restaurante Café Kacao en Oklahoma, tiene gran éxito y ha sido reconocido incluso por el propio Estado. Y es que además de la fusión de sabores guatemaltecos y americanos y de la excelencia en servicio, Zelada tiene una fuerte proyección comunitaria.
Por sus méritos al frente de este negocio y por sus facetas de apoyo a sectores necesitados, la publicación de negocios Journal Récord la incluyó en la edición 2024 del premio Mujer del Año. La velada de premiación será en octubre próximo.
“Creo estamos representando bien nuestra gastronomía , lo humilde de desayunar en casa, en la ciudad como en una aldea ; nuestros frijoles ; plátanos y sobre todo nuestro café de tierras guatemaltecas hecho especialmente para nosotros”, expresa Zelada en una publicación de redes sociales.
Verónica asumió desde muy joven el cuidado de sus hermanos menores. A los 21 años se casó, pero fue una etapa complicada, porque sufrió de violencia intrafamiliar. Es madre de tres hijos: Alex, Ana Iris y Luigi. Tomó la decisión de migrar a Estados Unidos en 2001, llegó a California.
El afán de superación se topó con dificultades. Decidió mudarse a Oklahoma, donde trabajó como conserje nocturno en una escuela. Su vida cambió cuando empezó a servir mesas en el café Don Brasil, lugar dirigido por Ana Paxio. Verónica descubrió su talento y habilidades culinarias además de implementar la sazón guatemalteca ya en su propio restaurante “Café Kacao”.
El primer paso
La migrante guatemalteca Verónica Zelada se caracteriza por su resiliencia y determinación de forjar una vida mejor. Así lo cuenta Luidgi Del Cid, uno de los tres hijos de Verónica. Ella abrío en 2004 su primer restaurante llamado “El Portal Café”. Su éxito estuvo en ascenso pero después de tres años tuvo que cerrar. “A pesar que el restaurante se volvió popular, era un poco pesado para mi mamá y lo vendió”.
Luego por varios años tuvo dos trabajos uno en las mañanas como Olive Garden y en las tardes trabajó en The Cheesecake Factory, pero la meta era clara para Verónica, así que durante ese tiempo ahorró lo que pudo para establecerse con mayor fuerza y experiencia. “Un día mi mamá me llamo y me dijo: a unas cuadras de donde vivimos esta una llantera y cerro, hablemos con el dueño para alquilar el local, a los tres días ya nos encontrábamos firmando el contrato”
La visión era clara y en el momento indicado las oportunidades se dieron. Verónica Junto a su hijo le dieron vida a “Café Kacao”. A finales del año 2010 se comenzó con los trabajos de remodelación y adaptación. El 26 de enero de 2011 comenzaron operaciones al público “Me recuerdo todavía vendimos mil dólares en nuestro primer día de ventas”, cuenta Luidgi,hijo de la migrante guatemalteca.
La popularidad del restaurante creció gracias a la idea de tener un restaurante con sabores centroamericanos en especial guatemalteco “la comida de la chef Verónica era y será la sensación de Oklahoma City por la innovación y fusión de sabores, en 2011 era un desierto de comida, claro había comida rápida pero no restaurantes con la esencia guatemalteca” relata Luidgi Del Cid.
Fusión de lo chapín y lo "americano"
El concepto de la comida guatemalteca se fusiona con otros sabores y sazones centroamericanas y ahora suramericana debido a la variedad y exigencia de los comensales “Por ejemplo, hay un plato que es la vaca frita, lleva pupusas salvadoreñas de chicharrón arriba con la carne de vaca frita, estilo cubano, huevos estrellados y salsa francesa. Una combinación entre los salvadoreño, cubano y francés”
Los platillos más populares son el “El Tikal” es una variación de huveos con carne con el twist americano acompañados de frijol negro, chorizo, tortillas de maíz. “El french” es una cubierta, trae crema de queso, caramelo, banano y berries frescas y “motuleños” son a base de tortillas de maíz con frijol arriba, huevos, salsa ranchera, aguacate, queso fresco, queso feta y rodeado por chips.
Otra de las especialidades de Cafe Kacao son las bebidas estás se implementaron en 2014, comenzaron con lo básico como; café espresso, moka, capuchino y ahora con bebidas exóticas entre licuados y refrescos naturales también el chocolate colombiano y chocolate mexicano. “Empezamos a involucrar más la cultura latinoamericana con el menú del restaurante”.
“Como cualquier restaurante siempre es súper competitivo, han habido varias empresas que han tratado de imitarnos entonces siempre nos preocupamos por innovar y dar el mejor servicio para nuestros clientes, ha sido difícil”
Cada desafío se supera
Al inicio de la pandemia en 2020 afectó a varios restaurantes incluyendo Café Kacao quienes cerraron por un mes por seguridad y reabrieron únicamente con el servicio para llevar “Eso fue difícil también, porque las ventas no eran las mismas entonces estábamos solo manteniendo la paga para los empleados, pero en realidad cada día era un día de pérdida”, afirma Luigi, quien trabaja junto a su mamá.
No solo se referían a reunir los suelos de los empleados sino también reinvertir en las instalaciones por las modificaciones que las autoridades establecieron para reabrir los restaurantes “Cada semana cambiaba algo, que usar doble mascarilla, careta, mesas a distancia con plásticos de por medio”
“Recuerdo que compramos 10.000 dólares de plexiglass para poder recuperar todas las mesas posibles: era un caos. Pero toda prueba se ha superado, gracias a Dios hemos sobresalido”
“Mi mamá es mi inspiración”
“Todos decidimos qué persona ser, mi mamá es mi ejemplo. Viajé con mi mamá desde Guatemala, México, cruzamos la frontera, dormimos en las calles de California, después en las calles de Oklahoma, pero mi mamá siempre se enfocó en cuidarnos y salir adelante. Mis hermanos Alex, Ana Iris y yo estuvimos con ella”
Al llegar a este país Verónica se dedicó a trabajar pero siempre en buscar un emprendimiento propio que construyó a lo largo de los años. Su historia como mujer, madre y emprendedora ha inspirado a mujeres inmigrantes radicadas en Oklahoma y el resto de Estados Unidos. Recientemente ganó el premio Journal Recorrer en el centro de historia de Oklahoma, nominada al premio The State of Oklahoma y recibió el premio Oklahoma Human Rights Awards.
Este último premio se le otorgó en reconocimiento a su trabajo y apoyo a la comunidad de mujeres migrantes solteras “Realiza actividades con madres solteras, también apoya a la iglesia va a las casas, hospitales a predicar y orar con los enfermos. ha sido un año muy bonito ver que la historia de mi mamá es compartido e inspira a mucha gente”
Los planes de Café Kakao enfoca su trabajo en poner en alto el nombre de Guatemala pero también apoyar a la comunidad migrante en Oklahoma y en Guatemala, el restaurante alberga a más de 50 empleados inmigrantes latinoamericanos en su mayoría guatemaltecos. Cumple 13 años de servicio a la comunidad latinoamericana en Oklahoma, Estados Unidos.