El calendario maya de Cuenta Larga fue un sistema revolucionario para registrar eventos históricos y cósmicos, abarcando miles de años desde su fecha inicial en el 3114 a.C. Aprende más de este aporte de la civilización maya.
Aunque su uso ha cambiado con el tiempo, la Cuenta Larga sigue viva en investigaciones arqueológicas y tradiciones espirituales, recordándonos la profunda conexión de los mayas con los ciclos cósmicos y la historia universal.
Este calendario marcó hitos en la civilización maya y reflejó su visión cíclica del tiempo. Conoce más sobre el calendario maya de Cuenta Larga con estas cinco preguntas.
¿Qué es el calendario maya de Cuenta Larga?
El calendario maya de Cuenta Larga es un sistema de registro temporal que permite medir largos períodos de tiempo, extendiéndose más allá de los ciclos anuales de otros calendarios mayas, como el Haab’ o el Cholq’ij. Fue utilizado para documentar eventos históricos, cosmológicos y políticos, abarcando miles de años.
¿Cuál es el sistema del calendario maya de Cuenta Larga?
El sistema de Cuenta Larga se basa en ciclos de días organizados en unidades mayores llamadas baktunes, k’atunes, tunes, winales y k’ines. Un baktún, por ejemplo, equivale a 144,000 días (aproximadamente 394 años).
Este método de medición comienza desde una fecha inicial que los mayas fijaron como 11 de agosto del 3114 a.C. en el calendario gregoriano. A partir de esta referencia, los mayas podían registrar fechas en el pasado y proyectar hacia el futuro.
¿Qué papel jugó el calendario de Cuenta Larga en la civilización maya?
El calendario de Cuenta Larga fue esencial para la cronología histórica y mitológica maya. Permitió a esta civilización registrar eventos significativos en sus estelas y monumentos, como coronaciones, guerras y rituales. También tenía un papel cosmológico, ya que reflejaba la concepción cíclica del tiempo, donde los ciclos se repetían en armonía con el universo.
¿Existe influencia del calendario maya de cuenta larga en la actualidad?
Aunque su uso ya no es común en la vida cotidiana, el calendario de Cuenta Larga sigue siendo relevante como un legado cultural y arqueológico. En 2012, se generó gran interés mundial por la finalización de un baktún en el 21 de diciembre de ese año, lo que algunos interpretaron como el «fin del mundo», aunque para los mayas simplemente marcaba el inicio de un nuevo ciclo.
Hoy en día, investigadores y comunidades indígenas continúan estudiándolo y preservando su significado espiritual e histórico.
¿Cómo está compuesto el calendario maya de cuenta larga?
El sistema de Cuenta Larga del calendario maya organiza el tiempo en ciclos de días divididos en cinco unidades principales:
- K’in: Representa un día. Es la unidad básica del sistema.
- Winal: Equivale a 20 días, similar a un mes.
- Tun: Corresponde a 18 winales, es decir, 360 días, cercano a un año solar.
- K’atun: Compuesto por 20 tunes, lo que equivale a 7,200 días o aproximadamente 20 años.
- Baktún: La unidad más grande del sistema regular, formada por 20 k’atunes, o 144,000 días (aproximadamente 394 años).
Este sistema permite registrar largas extensiones de tiempo, comenzando desde una fecha inicial establecida como el 11 de agosto del 3114 a.C. en el calendario gregoriano. Es un sistema cíclico que refleja la concepción maya de un tiempo continuo y repetitivo.
Tres ciclos del sistema calendárico maya
