El sitio arqueológico Piedras Negras floreció a la orilla del Río Usumacinta entre el siglo IV antes de Cristo y el siglo IX de nuestra era. La estela 14, aproximadamente del año 658, refleja un momento de gran poderío, cuando asciende al trono Yo'nal Ahk III, heredero de la dinastía de los señores Tortuga.
La estela 14 de Piedras Negras es de estilo “nicho” debido a una especie de marco que rodea a la figura principal: el gobernante Yo’nal Ahk III, que se encuentra asumiendo el poder, con una pose de predominio y señorío. El nombre original prehispánico de Piedras Negras fue Yok’ib y fue un poderoso reino que floreció a orillas del Río Usumacinta, en el actual noroeste de Petén.
La Estela 14 de Piedras Negras, erigida en el año 758 d.C., es un monumento de gran valor histórico y artístico que se conserva en el Museo de la Universidad de Pensilvania o Penn Museum. En esta escena aparece el joven rey sentado en un trono elevado, adornado con un tocado y joyas de jade, mientras sostiene una bolsa con incienso.
La inscripción en el lado izquierdo del monumento marca el evento de su ascensión al poder y su nuevo nombre real. A su lado, se encuentra una figura femenina, que podría ser la madre o la consorte del gobernante, quien sostiene un manojo de plumas, mirando cariñosamente al gran señor.
Jerarquía de poder e influencia
Lo más fascinante de esta estela es la representación detallada del momento de la entronización, en la que se aprecia no solo la figura del rey, sino también la de la mujer. En la escena, la figura femenina se destaca por su cercanía y protagonismo, lo que aporta una innovadora perspectiva en la representación de la dinastía real maya.
En Piedras Negras se encontraron unos 60 monumentos y estelas que fueron esculpidos a lo largo de unos cuatro siglos. En ellos figuran gobernantes junto a guerreros, consortes y también prisioneros. La dinastía de los Señores Tortuga duró varias generaciones y se heredaban el nombre.
La estela 14 de Piedras Negras fue elaborada en el estilo nicho, utilizado por los escultores de la región desde el siglo VII, y las firmas de los artesanos en el monumento, especialmente la de Koto’l Tz’ihb’ Pol, quien también talló para otros gobernantes, ofrecen un valioso testimonio del trabajo artístico en Piedras Negras. Esta estela fue creada por hasta seis artistas.
La Estela 14 es crucial para entender la política y la cultura maya, pues no solo documenta la ascensión de Yo’nal Ahk III, sino que también refleja la importancia de los rituales de entronización y las relaciones dinásticas. Gracias al trabajo de investigadoras como la arqueóloga rusa Tatiana Proskouriakoff, se logró entender que estos monumentos no solo tenían fines religiosos, sino que celebraban la vida y los logros de los gobernantes, ayudando a desentrañar la historia política de los mayas.
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