Las detenciones de migrantes que intentan cruzar indocumentados la frontera México-Estados Unidos son las más bajas en cuatro décadas entre octubre 2024 y septiembre 2025 según reporte de Insight Crime.
Las detenciones de migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México cayeron en 2025 a su nivel más bajo en más de cuatro décadas, de acuerdo con una investigación de InSight Crime. El descenso ha golpeado a las redes de tráfico de personas que, hasta hace poco, figuraban entre las principales fuentes de ingresos del crimen organizado en la región.
Según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), los agentes fronterizos interceptaron 238.000 migrantes durante el año fiscal que concluyó el 30 de septiembre, una reducción de 85% respecto a los 1,5 millones registrados en 2024. En 2022, las detenciones habían alcanzado un récord de 2,2 millones.
Aunque los flujos migratorios se redujeron de forma drástica, la mayoría de los detenidos siguen siendo ciudadanos de México, Guatemala, El Salvador y Honduras, según los datos oficiales.
Golpe al negocio del tráfico de personas
El informe de InSight Crime señala que antes del retorno del presidente Donald Trump a la Casa Blanca, el tráfico de migrantes y las economías criminales asociadas —como el secuestro y la extorsión— eran tan rentables que en algunos casos igualaban o superaban las ganancias del narcotráfico.
Pero la nueva política de mano dura contra la migración ha reducido los flujos hacia Estados Unidos y transformado el panorama criminal. El Centro Robert Strauss de Seguridad Internacional y Derecho de la Universidad de Texas en Austin estima que en agosto de 2025 había 6.600 migrantes viviendo en ciudades fronterizas mexicanas, mientras que el gobierno de México reportó 125.000 personas en situación migratoria irregular.
Migrantes en ruta atrapados y vulnerables
El análisis de InSight Crime advierte que, pese a la caída en los cruces, miles de personas —entre ellas guatemaltecos— permanecen varadas en México, sin acceso a documentos ni empleo, y más expuestas que nunca a los abusos del crimen organizado.
De acuerdo con la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), el 73% de los migrantes encuestados hasta septiembre de 2025 no contaba con papeles migratorios o de asilo. Más de la mitad afirmó haber sido víctima de algún delito, principalmente secuestro, robo o extorsión.
“Los grupos criminales evolucionan, se adaptan y responden a las dinámicas del mercado”, explicó a InSight Crime Stephanie Brewer, directora para México de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA). “Así que, aunque haya menos migrantes intentando cruzar la frontera, los que están en México han pasado de ser extremadamente vulnerables a absolutamente vulnerables”.
Fuente: InSight Crime (octubre de 2025), con datos de la CBP, ACNUR y el Centro Robert Strauss de la Universidad de Texas en Austin.
Migrantes son dignidad y aporte en USA













