Psicóloga, educadora, trabajadora social y presidenta del Centro Guatemalteco de New England, Rhode Island, Tiana Ochoa sirve a la comunidad migrante hispana con visión de futuro, desarrollo y grandes objetivos.
Entusiasta impulsora de las raíces guatemaltecas y también de la hermandad entre hispanos, la migrante guatemalteca Tiana Ochoa aporta a la comunidad de Rhode Island en el área educativa, cultural y social. Llegó a EE.UU. a los 15 años y fue esa misma vivencia de superar barreras la que fundamenta su convicción de apoyo a la niñez y familias.
«Los guatemaltecos debemos ser un poquito más aventados. Debemos perder el miedo a preguntar, a buscar ayuda. La idiosincrasia chapina nos lleva a veces a ser muy reservados, muy tímidos. Superemos eso. En EE.UU., preguntemos, toquemos puertas y se abrirán», sugiere Tiana, quien preside la asociación cultural Centro Guatemalteco de New England, fundada en 2010 y que cada septiembre celebra un festival chapín en honor a las fiestas patrias. Además trabaja en la organización Children’s Friends, como vicepresdienta de programas educativos.
Esta es su historia.
¿Hace cuanto existe el Centro Guatemalteco en New England, Rhode Island?
Es una organización que fue fundada en el 2010 para fomentar la cultura. Fue fundada por guatemaltecos, yo empecé como voluntaria. Pero a pesar del tiempo la misión sigue siendo la misma: transmitir nuestra cultura a través de expresiones artísticas y de identidad. Cada septiembre se efectúa el Festival Guatemala, un evento bien alegre en el que hacemos exhibiciones de pintura, presentamos a artistas visuales, se reconoce a personas que han hecho aportes y avances a la comunidad a través del Premio Quetzal.
El Festival de Independencia, organizado por el Guatemalan Center de New England en septiembre 2024 fue un éxito
¿A quiénes se ha entregado este premio Quetzal?
Surgió en 2011. Lo han recibido personas guatemaltecas y también hispanas que ayudan a la comunidad. En el 2011 fue el abogado y ex alcalde de Providence, Jorge Elorza, hijo de migrantes guatemaltecos. Ese fue el primero en recibirlo.
También está Olga Noguera, una de las fundadoras, que llegó a Rhode Island en la década 1970 y ha aportado mucho. En 2024 no se celebró el premio pero ya estamos programándolo para 2025. También vamos a retomar un programa de becas para que jóvenes guatemaltecos tengan apoyo para estudiar la universidad.
Actitud de servicio inspirada en su propia historia
Aproximadamente de los 7 a los 15 años, Tiana y sus hermanos vivieron en Guatemala al cuidado de sus abuelos y tíos. «Mi mamá migró a EE.UU. en 1985 en busca de oportunidades laborales». Buena parte de ese tiempo la vivió en San Rafael Las Flores, Santa Rosa, con sus abuelos.
Por eso al llegar el momento de irse para EE.UU., el cambio fue drástico: «Mi mamá logró llevarnos de manera regular. Y agradezco tanto su sacrificio. Pero fueron inicios difíciles, una adaptación muy fuerte. No hablaba inglés y después de estar en el campo llegar a una gran ciudad fue complicado».
Adaptarse a una nueva sociedad, a un sistema escolar distinto. Y por eso comprendo la situación de muchas familias migrantes. Uno de niño no entiende las razones pero de pronto tiene que cambiar de lugar donde vivir y cómo vivir.
Justo allí Tiana reconoce que surgió su inquietud profesional: «Eso me lleva a estudiar y entender el comportamiento humano. Porqué hacemos lo que hacemos. Y por supuesto que estoy agradecida por tanto sacrificio, tanto trabajo de mi madre y de mis familiares que nos apoyaron. Pero no todos los migrantes cuentan con ese apoyo y por ello son importantes las instituciones como en la que trabajo actualmente».
¿En qué trabajaba tu mamá cuando llegó como migrante a EE.UU.?
«Cuando mi mamá cuando entra a Estados Unidos trabaja cuidando niños. Muchas mujeres guatemaltecas migrantes vienen a efectuar ese trabajo, con cariño y dedicación. Pero imagínese: una mujer que de pronto deja sus tres hijos pequeños en su país y llega acá, para cuidar a los niños de otras personas».
¿Cómo recuerdas tu llegada a EE.UU.?
Fue empezar de cero. Llegas aquí y sientes que no encajas en el ambiente, no puedes hablar, no entiendes lo que te dicen. Pero también allí hay oportunidad para la hermandad. En mi primer día de escuelo, recuerdo que la primera chica que me encuentro es una joven de Honduras. Ella me dijo: «No te preocupes que yo te voy a ayudar y yo te voy a orientar». Y así tuve siempre ayuda, gente linda que aparece en el camino para apoyar. Entonces debo hacer lo mismo.
¿En qué trabajas actualmente?
Trabajo para la organización Children’s Friend que es una organización no lucrativa aquí en la ciudad de Providence, que ofrece un sinfín de servicios a niños y familias y yo en particular pues soy vicepresidenta de programas educativos para niños desde que nacen hasta la edad de cinco años.
En particular mi enfoque es en el programa llamado Head Start de cuidado jnfantil y Pre-K, donde nos aseguramos que los niños desarrollen su potencial y cuando ya les toca ir al kinder, al primer grado, que estén preparados emocionalmente, físicamente y hasta académicamente.
¿Cuáles son los retos más grandes que tienen estos niños o estas familias?
Sí, pues tenemos niños que de pronto, niños que nacieron durante la época de COVID y estamos viendo niños con mucho problema con retraso del lenguaje, que eso afecta mucho las posibilidades de aprendizaje de un niño. Estamos viendo familias que están pasando por momentos bien difíciles, ya sea económicamente, socialmente, familias que a lo mejor están teniendo dificultad con conseguir trabajo, mantener un trabajo. El programa es financiado por el gobierno federal y realmente se enfoca en las familias más vulnerables: brindan ayuda académica pero también otros servicios. Por ejemplo, si no tienen empleo o si necesitan ayuda para pagar su renta, alguna consejería. El programa es bien completo porque da apoyo al niño y a la familia.
¿Y ayuda a migrantes indocumentados o soloa personas con un status migratorio legal?
Este programa es para todas aquellas personas de bajos recursos, incluyendo a personas indocumentadas.
¿Hay guatemaltecos beneficiarios?
Hay muchos. Nuestro programa tiene 14 edificios en diversas partes de Rhore Island. Solo Head Start ofrece servico a 684 niños. Aparte está PreCare, de cuidado infantil. Hablamos de más de mil niños que estamos sirviendo.
¡Wow, que impresionante!
Sí, y cada vez que entro a un aula, no importa en parte de la ciudad, hay mucho niño hispano y por supuesto mucho niño guatemalteco.
¿Qué es lo que sueles aconsejar a los jóvenes y a las familias?
Damos esperanza. Que nada es fácil en la vida y que todo sueño requiere sacrificio. Pero siempre hay posibilidades de hallar quién puede apoyarte, quién puede guiarte, pero hay que estar dispuestos a buscar ayuda.ñ A veces no buscamos ayuda y nos quedamos callados… y no se soluciona nada así.
A veces los guatemaltecos somos así, nos da miedo preguntar
Sí, a esa idiosincrasia nuestra, de ser reservados, o tímidos. Nos da vergüenza preguntar. Pero hay que romper eso y mucha gente guatemalteca lo ha hecho. De hecho al Centro Guatemalteco de New England nos llaman o nos escriben con un sinfín de preguntas. A veces hasta creen que es el consulado y les ledimos. No somos el consulado, somos aparte, pero siempre estamos dispuestos a orientar a la persona, si no sabemos lo averiguamos y le explicamos.
¿Cuáles son las cualidades del guatemalteco?
Los guatemaltecos somos gente trabajadora, somos gente luchona, que de pronto somos también muy colaboradores. Nos encanta ayudar, nos encanta servir a las demás, en familia y en comunidad. El migrante guatemalteco tiene mucho que ofrecer y venimos de un país que tiene tanto de qué sentirnos orgullosos de quienes somos y de donde venimos. La sonrisa nunca nos falta y le hallamos el humor a todo.
Última pregunta: ¿Cuál es el gran sueño de Tiana?
Llegan más guatemaltecos a Rhode Island, ya somos una comunidad grande, pero debemos fortalecernos. En Centro Guatemalteco fomentamos los valores y la cultura… pero queremos fortalecernos en formar capacidades, que nos empodere, que podamos generar más desarrollo humano educativo, laboral, en salud. Podemos crear más alianzas, porque ya existen servicios así, pero queremos que más guatemaltecos tengan conocimiento y acceso a ellos.
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