La actual capital de Guatemala fue fundada en 1776, después de la destrucción del tercer asentamiento en el Valle de Panchoy, tres años antes.
El traslado de la capital de Guatemala a su actual emplazamiento —la entonces llamada Nueva Guatemala de la Asunción— se oficializó en 1776, luego de que los devastadores terremotos de Santa Marta en 1773 destruyeran la Antigua Guatemala.
El 23 de mayo de ese año, el rey Carlos III autorizó el nombre oficial para la nueva ciudad, marcada por ser la primera fundada según los ideales ilustrados en la región.

Elección del terreno: Valle de la Ermita
La ubicación fue pensada cuidadosamente: se escogió el Valle de la Ermita (también conocido como valle de las Vacas o de la Virgen) por características favorables —distancia segura de los volcanes, clima templado, buena disponibilidad de agua, drenajes naturales y fertilidad para cultivos— además de contar con asentamientos previos que facilitaron su ocupación.
El historiador Édgar Chután Alvarado, afirma que ese valle comprendía diversos parajes como Mixco, Chinautla, Canalitos, Los Ocotes, El Incienso, El Naranjo, La Culebra, y Las Vacas, que a su vez incluían áreas como San José del Golfo, Palencia, El Fiscal y Las Navajas. Argumenta que el sitio fue elegido por sus condiciones geográficas y disponibilidad de recursos, además de su clima y cercanía con otros pueblos importantes.

Trazado urbano: orden colonial con influencias ilustradas
El diseño urbano siguió el modelo reticular, con manzanas cuadradas, orientadas a los puntos cardinales y una plaza central rodeada de edificios civiles y religiosos, replicando el patrón urbano español.
El primer proyecto fue obra de Luis Díez Navarro, con aportes posteriores de arquitectos como Marcos Ibáñez, Sebastián Gamundi, Antonio Bernasconi, Antonio Porta y Bernardo Ramírez.





Dificultades técnicas y suministro de agua
En cuanto al agua, se enfrentó un reto significativo. La ciudad se abastecía principalmente por dos acueductos: uno proveniente de Mixco (desde el río Panzalíc) y otro de Pinula, instalado en 1775 y que corría sobre el cerro de La Culebra hasta un depósito ubicado en lo que actualmente es la zona 1. El desarrollo inicial fue modesto: las calles se empedraron sólo alrededor de la Plaza Mayor y las infraestructuras como agua y drenajes eran muy limitadas.

Primeros barrios y orden social
La estructura social colonial también quedó reflejada en el diseño urbano. Alrededor de la Plaza Mayor se concentraban la élite, con residencias espaciosas, mientras que la población indígena vivía en los barrios periféricos, aledaños a conventos y parroquias: barro clásicos como San José, La Merced, El Calvario, Santa Rosa, San Sebastián, La Recolección, Santa Catarina, Santuario de Guadalupe, San Gaspar, La Parroquia y La Candelaria fueron los primeros en conformar la ciudad.
Balance histórico
La fundación de la nueva capital en 1776 simboliza el fin de una era marcada por sismos y el inicio de un proyecto urbano ordenado, influido por la Ilustración.
A pesar de los desafíos técnicos, el suministro de agua limitado y la necesidad de consolidar servicios básicos, se puso en marcha una ciudad que reflejaba tanto las prioridades políticas como las aspiraciones sociales del momento.
- En 1776, se fundó Nueva Guatemala de la Asunción tras los terremotos que destruyeron la capital anterior.
- Se eligió el Valle de la Ermita por sus condiciones favorables: clima, agua, recursos, topografía y seguridad frente a volcanes.
- El trazo urbano siguió una cuadricula típica colonial, con una plaza central, diseñada por Luis Díez Navarro y otros arquitectos.
- El abastecimiento de agua se garantizaba mediante acueductos desde Mixco y Pinula, aunque con infraestructura limitada.
- Los primeros barrios se formaron alrededor de conventos y parroquias, reflejando una estructura social desigual.
Lugares emblemáticos de Guatemala

















